Héctor Hernández Parra
Una óptica histórica diferente es la publicación de un libro, escrito por Pablo Moctezuma Barragán, editado para significar el 500 aniversario de la muerte de Cuauhtémoc, Tlatoani azteca y dirigente, ejecutado el 28 de febrero de 1525.
El objetivo sesgado a la información histórica que recibimos en las aulas y que nos había situado en lo que fue el encuentro entre peninsulares, comandados por Hernán Cortés, y los líderes indígenas que interactuaron con exploradores y colonizadores venidos del viejo mundo. Según el texto ya aparecen conceptos como neocolonialismo, neoliberalismo, imperialismo, españoles invasores.
En 500 años, la confronta de información que el propio Hernán Cortés con sus Cartas de Relación “La Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España” del soldado Bernal Díaz del Castillo y otros destacados investigadores, contra la versión de izquierda que ahora califica como mentiras las acciones y luchas que protagonizaron diversas tribus enemigas entre sí contra los invasores que llegaron a imponer cultura y religión en el Valle de Anáhuac.
Ahora Moctezuma Barragán nos dice que los principales roles de gobierno eran encabezados por mujeres a través de un Consejo de Mujeres: Tlatocan Cihuatlatocan electas por designación popular que dictaban acuerdos obedecidos por los Tlatoanis como Moctezuma. Según el texto de Moctezuma Barragán algunas costumbres ya se practicaban en tierra azteca como el uso de las “piñatas” y que no fue una de las actividades traídas de Italia y China. Hay que recordar que serían los frailes franciscanos quienes utilizaron diversas estrategias para evangelizar.
Finalmente, la enseñanza que nos puede aportar el texto, es descubrir a un investigador de izquierda que insiste en mostrarnos que la llegada de los peninsulares al Valle de Anáhuac, representa históricamente la llegada del “neocolonialismo” del “neoliberalismo”, al mencionar que la Historia de la Conquista en la Nueva España está plagada de mentiras, que Cortés y sus soldados fueron movidos por la ambición y la codicia. En conceptos históricos existen innumerables versiones que se contradicen entre sí.
En la oportunidad de visitar zonas arqueológicas, museos de sitio, templos religiosos o lugares históricos existe una invitación para conocer o descubrir para nosotros, información culturalmente desconocida. El texto es “Cuauhtémoc, águila que retorna el vuelo” presentado en Coatepec en dos ocasiones por el autor.
REFLEXIÓN CIUDADANA
El destino alternativo del municipio de Coatepec se perfila hacia el turismo. Un sector que lentamente descubre las características que deben analizarse a fondo para obtener resultados.
Fortalezas, amenazas, debilidades y oportunidades que aportan información valiosa para enfocar metas y objetivos aprovechando recursos.
Un recorrido con amistades nos llevó al atrio del Templo Parroquial de San Jerónimo. Observamos que en un rincón está una pequeña zona donde se encuentra una placa conmemorativa y una cruz metálica que conmemora la existencia de la orden Franciscana Seglar, un elemento histórico ignorado por propios y extraños. La incomodidad turística es la presencia de un contenedor de plástico para concentrar los desechos de los turistas.
El turismo religioso, alternativa interesante para quien lo descubra. Ni el clero, ni los expertos en turismo municipal han descubierto el incidente.
En 1704 se fundó en la iglesia construida con ramas, varas y zacate, la cofradía de “Las Ánimas”, los franciscanos iniciaron la tercera orden franciscana seglar. El recuerdo para la posteridad está materializado en una placa que se encuentra hoy junto a la basura.
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