Tras un desalojo, a medias, ejecutado el pasado viernes 26 de abril, por orden de un juez federal y la intervención de la Fuerza Pública en el predio Jinicuil Manso, ubicado en el municipio de Coatepec, los propietarios denuncian que los campesinos de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC) han retornado y vuelto a invadir sus tierras.
La acción de desalojo, que involucró a cerca de 100 policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), tuvo lugar en la mañana del viernes 26 de abril. Sin embargo, los propietarios alegan que la SSP no cumplió con la totalidad de la orden judicial, incluyendo el retiro completo de todas las personas presentes en el predio y sus pertenencias, incumpliendo así los términos establecidos por el juez federal.
Según los denunciantes, también se pasaron por alto otras instrucciones del juez, como la asistencia del DIF municipal para garantizar el adecuado trato, según perspectiva de género y del adulto mayor; así como el cumplimiento de los gastos de la diligencia, los cuales debían ser asumidos por la Fiscalía General del Estado (FGE), incluyendo bienes, medios, insumos, herramientas y personal necesario para la ejecución de dicha acción.
Además, se destaca que la Fiscalía de distrito de Coatepec debía asegurar los bienes muebles presentes en el predio, depositándolos y resguardándolos, lo cual no ocurrió.
Ante esta situación, los propietarios del predio han presentado una denuncia por amenazas ante la Fiscalía General del Estado, específicamente ante la Fiscalía Séptima de la Unidad Integral Coatepec. Según el relato de los denunciantes, durante un intento de certificación del estado del predio junto con una notaría pública, fueron atacados con petardos, lo que motivó la presentación de la denuncia.
La situación en el predio Jinicuil Manso se mantiene tensa, con acusaciones cruzadas entre propietarios y campesinos, y con la intervención de las autoridades para resolver este conflicto que involucra aspectos legales, de seguridad y de derechos de propiedad.
