Beneficencia
El 8 de mayo se celebra el Día Mundial de la Cruz Roja, en conmemoración del nacimiento de Henry Dunant, el fundador de la Cruz Roja. Es de reconocer la encomiable labor de voluntarios que todos los días salvan vidas, ayudan a los más desfavorecidos y cambian mentalidades. Por ello, hoy hablamos de la Beneficencia.
Beneficencia se refiere a la acción o práctica de hacer el bien y ayudar a las personas más necesitadas sin pedir nada a cambio.
La palabra beneficencia deriva del latín beneficentia. Entre los sinónimos que se pueden emplear en referencia a este término son: filantropía, caridad, ayuda, humildad, atención o favor.
La beneficencia se puede considerar como un valor que implica la disposición de ayudar de manera desinteresada a quienes más lo necesiten. Por otro lado, a quienes llevan a cabo este tipo de acciones se les denomina como benefactores.
Ahora bien, la beneficencia es una práctica que puede realizar cualquier persona que desee tener un gesto de ayuda con el prójimo. Por tanto, puede ser un individuo, una organización o institución, pública o privada, quienes aporten diversos recursos o servicios a fin de cubrir las necesidades de los más necesitados.
Los actos de beneficencia incluyen donaciones de alimentos, medicinas, juguetes, ropa y calzado, entre otros. Asimismo, servicios médicos, charlas educativas, construcción de viviendas, escuelas, centros de salud, restitución del funcionamiento de servicios públicos, entre otros.
En estas actividades de beneficencia acostumbran a participar un gran número de voluntarios, quienes aportan sus conocimientos o recursos, y tienen la disposición de ayudar al prójimo.
Ser benefactor es una vocación, de allí que se relacione con la filantropía, es decir, amar a la humanidad de manera desinteresada.
Los benefactores que realizan estas actividades y las promueven lo hacen partiendo de su sentido de caridad y bondad, a fin de generar un beneficio y hacer sentir mejor a quienes reciben su colaboración.
En este sentido, la beneficencia es un acto de amor al prójimo, es desinteresado y solo busca el bienestar común.
Por otra parte, son muchas las grandes empresas que ejecutan actos de beneficencia y ayudan en diferentes partes del mundo a miles de personas de escasos recursos y que atraviesan diversas necesidades. Tras estos actos, tanto el benefactor como quienes se ven ayudados, reciben y dan amor.
