El 20 de diciembre se conmemora mundialmente el Día Internacional de la Solidaridad Humana, una fecha proclamada por la ONU para promover la unión, el apoyo mutuo y la lucha contra la pobreza.
Esta fecha coincide con el periodo en el que se proclamó la Declaración del Milenio, que destacó la solidaridad como un valor esencial en las relaciones internacionales y en la erradicación de la pobreza.
El objetivo principal de esta celebración es fomentar la cultura de la solidaridad, el compartir y la cooperación entre los pueblos, especialmente con aquellos más vulnerables. La solidaridad implica unión, apoyo mutuo y responsabilidad compartida para promover el bien común.
Este valor es considerado clave para: Erradicar la pobreza y reducir la desigualdad a nivel mundial. Promover el desarrollo humano y social, especialmente en países menos industrializados. Fomentar relaciones internacionales basadas en el respeto y la cooperación, tal como se indica en la Declaración del Milenio.
Se aprovecha la fecha para reflexionar sobre problemáticas globales y locales, como la pobreza, la desigualdad o la vulneración de derechos de grupos vulnerables. Una oportunidad para reforzar la cooperación internacional y la responsabilidad social, recordando a la comunidad global que el bienestar de cada persona depende de la solidaridad de todos.
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